La identidad de Ieshúa.-
Es lo que humildemente queremos explicar a través de distintos artículos que iremos publicando.- Sinceramente, no es nuestra idea convencer a nadie, sino exponer de forma simple y concreta nuestro punto de vista con respecto a Ieshúa como Mashiaj y como divino, (entendiendo por “divino” no como una persona distinta a D-os, sino como D-os mismo).-
Creemos profundamente en la Shemá: “Escucha Israel, HaShem nuestro D-os, HaShem UNO ES”.- HaShem Ejad.-
Por esto mismo entendemos las dudas y los cuestionamientos que existen alrededor de la divinidad de Ieshúa.- Y sabemos perfectamente que nuestra mente finita no puede comprender la anchura, la longitud, la altura de la sabiduría de nuestro D-os, por eso apelamos a que se nos revele por su gran misericordia para que podamos conocer su Salvación provista, y profetizada desde la antigüedad en la Biblia.-
La salvación del hombre no puede venir del hombre.- Las Escrituras enseñan que solo D-os provee salvación, solo en EL hay salvación y en su brazo extendido.- Para alcanzar salvación y no errar debemos escudriñar la Palabra de D-os (su Torá), ponerla por obra y conocer su poder.-
A modo de introducción al tema podemos decir que el judaísmo tradicional ha cambiado de opinión respecto al tema de definir al Mesías. No es lo mismo lo que opinaban los rabinos de la época anterior y contemporánea a Ieshúa a lo que sostienen actualmente los rabinos, cuya formación está basada en todas las enseñanzas que vinieron posteriores a la época de Ieshúa.-
Anteriormente (a la época de Ieshúa) los rabinos decían que al Mesías se lo reconocería porque le devolvería la vista a los ciegos, porque limpiaría a los leprosos (ya que es una enfermedad de origen espiritual), porque resucitaría a los muertos y porque perdonaría pecados…
Se desarrollaron dos corrientes de pensamiento diferentes:
-el Mashiaj Ben Iosef
-el Mashiaj Ben David
En el caso del Mashiaj Ben Iosef, se habla de un Mesías sufriente, que padece todo por salvar a su pueblo, y aún a todos los demás pueblos (tal como ocurrió con Iosef, el hijo de Iaacob, que salvó del hambre y de la muerte segura no solo a su pueblo sino a muchos otros pueblos, proveyéndoles pan. Es muy interesante la comparación de la vida de Iosef con la de Ieshúa…)
En el caso del Mashiaj Ben David, se habla de un Mesías rey, con todo poder y autoridad, descendiente de HaMelej David, que llevaría a Israel y a la Torá de D-os a un lugar de preponderancia.-
Nuestro Señor Ieshúa le devolvió la vista a los ciegos de nacimiento; limpió a los leprosos, les tocó otorgándoles sanidad, resucitó a muchos muertos, y perdonó pecados para mostrar que tenía autoridad para hacerlo (Mateo 9:2-8).
El padeció por salvar a su pueblo, alimentó a muchos con pan físico y espiritual, la Palabra de D-os.-
El es descendiente directo del linaje de HaMelej David, enseñó la Torá a todos, aún a los rabinos, a los religiosos, saduceos, fariseos, escribas, gobernantes…El engrandeció la Torá; no solo la cumplió sino que enseñó a otros a guardar los preceptos de D-os.-
Por todo esto, no fueron todos los judíos los que no creyeron en él; sino que hubo muchos que sí lo hicieron, aceptándolo como Mashiaj, como el profeta anunciado por Moshé que habría de venir:
“Profeta de en medio de ti, de tus hermanos, como yo, te levantará HaShem tu D-os; a él oiréis; conforme a todo lo que pediste a HaShem tu D-os en Horeb el día de la asamblea, diciendo: No vuelva yo a oír la voz de HaShem mi D-os, ni vea yo más este gran fuego, para que no muera. Y HaShem me dijo: Han hablado bien en lo que han dicho. Profeta les levantaré de en medio de sus hermanos, como tú; y pondré mis palabras en su boca, y él les hablará todo lo que yo le mandare. Mas a cualquiera que no oyere mis palabras que él hablare en mi nombre, yo le pediré cuenta.” Dvarim 18:15-19
Si conocemos las Escrituras tenemos presente que D-os se relacionó a través de la emuná, la fe, la fidelidad.- Abraham fue probado…”vete de tu tierra y de tu parentela, a la tierra que te mostraré…” El salió confiado, D-os le había hablado, lo seguiría aún si esto le costaba dejar atrás todo lo que tenía, puso su emuná en HaShem.- Primero cree, luego se te mostrará…
La divinidad de Ieshúa fue cuestionada por las personas de su generación, hoy en día sigue siendo debatida por aquellos que no han creído en El, por aquellos que no han querido oír sus palabras, que quizás no han escudriñado a fondo las Escrituras y que no conocen aún el poder ilimitado de D-os…
