La palabra Parashá significa “porción”, es el nombre que se le da a la porción de la Torá que se lee por semana (parashá hashavúa, la porción de la semana).-
La división de la Torá para su lectura en un año, desde Bereshit (Génesis) hasta Dvarim (Deuteronomio) corresponde a 54 porciones o parashot.- Cada una de ellas es leída y explicada públicamente en las congregaciones en cada shabat.-
Asimismo, a estas porciones se les agrega también para su lectura, una parte de los profetas (Neviím) conocida como “Haftará”. Y en nuestra congregación judío mesiánica también leemos una porción del Brit Jadashá (Nuevo Pacto) para completar así la parashá semanal.- Es decir, la porción de la Escritura que debemos escuchar con atención para aprender, poner por obra y enseñar a otros a cumplir con los mandatos y preceptos del D-os único y verdadero.-
Emor significa “Diles”.- Y ésta parashá tiene que ver con la santidad de los sacerdotes dedicados al servicio a D-os. Santidad que debía ser muy cuidada, pues había y hay condiciones para servirlo.-
En la antiguedad los sacerdotes paganos estaban muy ligados al culto a los muertos.
En cambio la Torá es Sefer Hajaim (el Libro de la Vida) por tanto los sacerdotes de D-os debían estar alejados de esos rituales, y obviamente no podían participar de éstas prácticas con los muertos.
Por ser los sacerdotes los encargados de recibir las ofrendas y llevarlas ante D-os, esto conllevaba tremendas responsabilidades y compromisos.- Ya que debían conducir a todo un grupo humano, y si no lo hacían como debía hacerse, tanto el sacerdote como el pueblo podía terminar camino a la destrucción. Los sacerdotes daban, dan y darán cuentas.
El cohen (sacerdote) tenía que velar porque su familia se mantuviera en santidad. No solamente tenía que velar por la santidad del pueblo, sino por la santidad de su propia casa.
El cohen tiene que estar aferrado a la vida, alejándose de la muerte totalmente. Porque nuestro D-os es un D-os de vivos. La persona que sirve a D-os no puede estar relacionada con la muerte.-
D-os nos ha constituído en sacerdotes. Si dedicamos nuestras vidas a servirle, Él se dedicará a nosotros. Si nosotros nos ocupamos de su servicio, Él se ocupará de nuestros asuntos. Nuestro Señor Ieshúa HaMashiaj dijo: “Buscad primeramente el reino de D-os y su justicia (sus estatutos, sus leyes) y lo demás vendrá por añadidura…”
Volviendo al principio; ésta Parashá se llama emor “diles”, porque D-os le ordenó a Moisés que le dijera a Aarón y a los cohanim (sacerdotes) las leyes de santidad. Es necesario que nosotros también les digamos a los demás acerca de la santidad.
“Más vosotros sois linaje escogido, real sacerdocio, nación santa, pueblo adquirido por D-os, para que anunciéis las virtudes de Aquel que os llamó de las tinieblas a su luz admirable; vosotros que en otro tiempo no erais pueblo, pero que ahora sois pueblo de D-os; que en otro tiempo no habíais alcanzado misericordia, pero ahora habéis alcanzado misericordia.” 1 Pedro 2: 9-10